Este artículo esta relacionado con : Perros / Curiosidades
Hay veces en las que los niños tienen ciertas dificultades a la hora de ponerse a ojear conveniente a que tienen cierto retraso o admisiblemente a que su comportamiento les hace ser incapaces de sentarse y ponerse a ojear tranquilos.
Sin bloqueo, hasta en esas tareas que cualquiera pensaría que se necesita a un adulto para que corrija el comportamiento y pueda así hacer que el irreflexivo lea, puede ser realizada por un simple perro, a menudo con mejores resultados de los que obtendría un adulto.
Esto se desprende de un estudio donde se deja claro cómo los perros son capaces de que los niños lean sin miedo a equivocarse o a ser corregidos, poco que nos pasa a menudo, que siempre tendemos a corregir a los niños y eso hace que los niños vean la recital como una forma de regañina.
El estudio realiza la próximo prueba: se deja en el clase a un irreflexivo y a un perro adiestrado para escuchar lecturas (es opinar, que se muestre atento frente a las palabras del irreflexivo). El irreflexivo ha de leerle al perro de modo que él es el que sabe si está leyendo admisiblemente o no pues no hay nadie que le diga que lo hace mal.
Los perros, así, consiguen darle confianza a los niños de poco que están aprendiendo, como es ojear, y poco a poco consiguen ir cometiendo menos fallos encima de interesarse cada vez más en la recital (se crea un vínculo así entre los dos).
Esperamos que hayas disfrutado al ojear esta comunicación como nosotros disfrutamos al publicarla para ti, nos seguiremos esforzando día a día para traerte más contenidos de calidad.