Encontra todo sobre Conejos
El conejo angora seguramente we originó en Turquía. Luego fue evolucionando en la Europa Mediterránea, siendo Francia la fijadora de sus caracteres y perfeccionada en Inglaterra. Su nombre proviene de su similitud con el felino angora.
El conejo angora presenta rico pelaje. El escaso diámetro y la distancia de los pelos son factores muy llamativos para la industria textil pues las prendas confeccionadas con este tipo de hilados pesan menos que la tirabuzón y dan mucho más sobretodo. Encima, su carácter extremadamente manso lo hace dieal como mascota.
En el cuidado de un conejo angora no resulta adecuado bañarle el baño pues se pone muy nerviosos y puede alcanzar a ser una experiencia traumática. Como mucho hay que hcerlo dos o tres veces al año y con un champú adecuado para él. A renglón seguido, se le sequía con sumo cuidado y delicadeza con una toalla.
Encima, este conejo debe tener su pelo cepillado pues es muy grande y así se evitarán nudos o enfermedades relacionadas con bichos. Hay que cepillarlo al menos dos o tres veces por semana. Hay que hacerlo suave y despacio para que el conejo lo acepte de buen fracción. El cepillo ideal es de metal.
En relación a su provisiones, el heno es secreto ya que le ayuda a evitar posibles problemas intestinales e incluso a algunos conejos les gusta usarlo todavía como cama. Encima, hay que darle alimentos que tenga vitaminas como pequeños trozos de hortalizas como la zanahoria.
La mazmorra de este conejo tiene que ser prócer pues puede alcanzar a pesar hasta 4 kilos en la años adulta, aunque lo más normale son 2 kilos. Precisa moverse y valer para que no se le atrofien los músculos por ello conviene sacarle al menos una vez al día para que pueda ejercitarse. La mazmorra debe estar admisiblemente ventilada y con una temperatura no superior a los 30ºC ni pequeño de 10ºC.
De vez en cuando se deben cortar sus uñas pues le crecen mucho y pueden ocasionarle problemas. Al poblar en una mazmorra, no puede rasguñar y cortarse las uñas de forma natural. Igualmente hay que fijarse en los dientes del conejo y ver si están sanos; en caso de duda, lo mejor es llevarlo al veterinario.
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